Después de más de un mes sin hacer referencias en este blog a las constelaciones, me dispongo a enseñarles una de las constelaciones más hermosas del firmamento. Se trata de Leo, una de las constelaciones por las que cruza la eclíptica y por ella los planetas, la Luna y el Sol. Nuestra estrella cruza por esta constelación durante el mes de Agosto, es por eso que solo es visible desde Septiembre-Octubre (en el amanecer por el Este) hasta Julio (al atardecer por el Oeste).
La fotografía que he tomado es la que sigue:
Las estrellas nos muestran claramente un león, o por lo menos un animal. La mitología griega representó esta constelación como el León de Nemea, un poderoso león que mataba a los animales de ganado y a las personas y nadie podía atrapar. Fue el héroe Hércules quien hizo frente al león en la primera de las doce tareas encargadas por la esposa de Zeus, y logró derrotarlo abrazándolo con una fuerza sobrehumana.
Se dice que Zeus otorgó un lugar en el cielo al León de Nemea en honor al valor de su hijo y para que todos pudieran recordar su valerosa hazaña. En la siguiente imagen muestro la representación del león siguiendo las líneas de que dejan las estrellas:
La constelación de Leo tiene una importancia en todas las culturas por su posición en el zodíaco y por su magnificencia en el cielo. Es por eso, que en muchas culturas se ha puesto nombre a todas las estrellas para clarificar la posición del león en el firmamento, a continuación les muestro los nombres más comunes de las estrellas más brillantes de la constelación:
Los nombres de las estrellas, en su mayoría, hacen referencia a las partes del león que ocupan, un ejemplo es “Denébola” que en árabe significaba “la cola del león” (es posible ver la coincidencia con la estrella “Deneb”, la cola del cisne), “Zosma” que sería “la espalda del león” o “Rasalas”, “la cabeza del león”. A esta última tiene le tengo especial cariño por la relación que guarda con el nombre de mi pueblo, Rasal, de origen árabe que significa “la cabeza”.
Estas estrellas brillantes, son en su mayoría estrellas de vida corta que liberan mucha energía a lo largo de sus vidas. La distancia entre ellas y nosotros ronda los cien años luz aproximadamente, y en la todas ellas, la luminosidad es algunas decenas la del Sol, lo cual nos lleva a pensar en lo pequeña que es nuestra estrella. De la misma forma, todas tienen radios superiores al Solar, que van desde 2 radios solares en la estrella Denébola hasta los 60 radios solares en Alterf.
Esta estrella es una gigante naranja que ya ha pasado por una fase blanca y seguirá siendo naranja unos cien millones de años más, tiempo a partir del cual, pasará a gigante roja enfriándose y aumentando todavía más su tamaño. Actualmente llegaría hasta Mercurio si se encontrase en la posición del Sol, nosotros la veríamos (si existiese la posibilidad de seguir vivos ante semejante estrella) sesenta veces más grande que el Sol, ocupando de día aproximadamente un quinto de nuestro campo visual en el firmamento, ¿se lo imaginan?
En cuanto a la masa, la estrellas van desde 1,6 masas solares en Rasalas hasta las 7 masas solares de Al’dzhabkhakh. Esta estrella de extraño nombre tiene las características más extremas de todas las estrellas de la constelación. Su luminosidad es nada menos que 16400 veces la solar, y se encuentra más lejos que las otras, a más de dos mil años luz. Es por eso que no es la más brillante de la constelación, título que pertenece a Régulo (el rey pequeño) pos su cercanía a nosotros, a tan solo 77 años luz.
Volvamos a la estrella de Al’dzhabkhakh, si esta estrella se encontrase a la distancia a la que se encuentra, por ejemplo, Vega (unos 30 años luz), se vería unas diez veces más brillante que Venus en su mayor brillo, una estrella que para nosotros sería inmensamente brillante, más aún si estuviese más cerca.
En general, cada estrella es única y diferente a las demás. En noviembre del 2009 se descubrió un exoplaneta orbitando la estrella de Algieba. Se trata de un planeta de tipo rocoso, del tamaño de Júpiter y ocho veces más masa, se encuentra a una distancia de su estrella igual que la de la Tierra al Sol. Eso conlleva un problema para la vida y es que Algieba es 285 veces más luminosa que el Sol y tiene un radio 29 veces mayor, con lo que la radiación que llega al planeta es muy elevada. Tanto es así que su temperatura superficial media debe rondar los mil grados.
Este planeta ha sido detectado por la oscilación de la estrella, que es empujada por la fuerte atracción gravitatoria del planeta, además se puede conocer la magnitud de esa oscilación por el llamado “efecto Doppler” producido por el cambio de color en la estrella al moverse (es el mismo efecto que se escucha en la autopista cuando se acerca o se aleja un coche a gran velocidad, al alejarse el sonido es más agudo que al alejarse por la compresión de las ondas sonoras). Combinando estos dos efectos, es posible determinar la distancia orbital y la masa del planeta.
Una vez estudiadas las estrellas vamos a ver cuáles son los objetos celestes de cielo profundo más habituales en la constelación de Leo: las galaxias.
Todos los objetos celestes que hay en esta constelación son galaxias porque Leo, al igual que Virgo o Cabellera de Berenices se encuentra en la posición vertical del disco de nuestra galaxia. De esta forma, al mirar hacia allí, estamos observando las profundidades del universo, hacia el exterior de nuestra galaxia. Es por eso que se observan cientos de galaxias unidas en cúmulos en esta constelación y en las citadas anteriormente.
El cúmulo de galaxias más conocido de Leo es el Triplete de Leo, (guiño a todos los culés ;) ) que ya he tenido la oportunidad de fotografiar y sobre el que pueden leer más información en el siguiente enlace:
Está formado por las galaxias M 65 / NGC 3623, M 66 / NGC 3627 y NGC 3628, un grupo de galaxias unidas gravitatoriamente. Lo mismo ocurre con el grupo M 105, formado por las galaxias elípticas M 105 / NGC 3379, NGC 3384 y la espiral NGC 3389.
Esto es todo lo que quería enseñarles esta semana, espero que hayan disfrutado imaginando el tamaño de la estrella Alterf sobre nuestro cielo o el brillo de la curiosa Al’dzhabkhakh. Les espero la semana que viene. Un saludo y buenos cielos.
Gracias David, para mi Leo es una de las constelaciones mas bonitas de las noches de invierno y primavera.
ResponderEliminar