Hace unas semanas fue la máxima elongación de Mercurio (momento más alejado del Sol) como podéis ver en la sección de mi blog “Próximos eventos astronómicos”. Esto sucede cada aproximadamente dos meses producido por la suma de la translación de Mercurio entorno al Sol y la de la Tierra entorno al mismo. Es un efecto que se observa en los dos planetas interiores. Se alejan del Sol una distancia máxima para volver a acercarse otra vez.
De esta forma, esos momentos son los más propicios para fotografiar estos planetas. Esta es mi fotografía a Mercurio, el primer planeta del sistema solar:
Como he dicho, el mejor momento para fotografiar Mercurio es cuando se encuentra más alejado del Sol, pues es cuando se puede observar durante más rato por la noche y el cielo de fondo es más oscuro. Mercurio, al ser el planeta más cercano al Sol, no se aleja mucho de él y eso dificulta su observación, aun así se intentó fotografiar aunque el resultado no sea excelente.
El problema que tengo para fotografiar Mercurio en mi pueblo es que está rodeado de montañas, debido a ello, el tiempo para observarlo es considerablemente menor. Por eso al fotografiarlo el cielo todavía brilla bastante.
Otro problema que surge al fotografiar Mercurio es que al no separase mucho del Sol, no asciende mucho en el cielo cuando el Sol se ha ido, eso conlleva que la atmósfera que hay entre él y nosotros es mucho mayor que en otros planetas que se observan alejados del horizonte. La atmósfera distorsiona la imagen del cielo, más aún cuando la capa que se atraviesa es mayor.
La anchura de atmósfera en el horizonte puede llegar a ser hasta tres veces la anchura de la atmósfera en el cenit (justo encima de la cabeza). Eso significa, en el mejor de los casos, una distorsión tres veces mayor de la imagen que se toma. Aún así se observa en la fotografía la fase de cuarto menguante que tiene Mercurio.
La parte iluminada de Mercurio (al igual que la de la Luna y Venus) siempre apunta en la dirección hacia la que está el Sol, como es de esperar. Es por eso que cuando está en el Oeste, la fase es menguante y cuando se encuentra en el Este, la fase es creciente. Al contrario que la Luna, la fase no engaña, la D indica decreciente o menguante y la C indica que está creciente. Cuando el planeta aparece por el Este solo es observable al amanecer y al atardecer si aparece por el Oeste.
Mercurio es un planeta árido y sin atmósfera. Si observásemos una fotografía suya en la que se apreciase su superficie, nos podría parecer que es la Luna, pues su superficie está completamente llena de cráteres de los asteroides y cometas que se precipitan en dirección al Sol por su inmensa gravedad.
La peculiaridad más importante de Mercurio es ser el planeta más cercano al Sol. Eso provoca en su órbita una pequeña precesión entorno al Sol. Esto significa que su órbita es elíptica y no permanece imperturbable en el tiempo, sino que la misma órbita “rota” también entorno al Sol. Esta fue una de las pruebas con las que se confirmó la relatividad general de Einstein, pues este efecto observado era inexplicable con las leyes gravitatorias conocidas hasta la fecha (las de Newton).
Uno podría pensar que es el planeta en el que hace más calor del sistema solar por su cercanía al Sol, pero ese título corresponde a Venus, el planeta con la temperatura media más alta. De este planeta ya hablé en una ocasión anterior, podéis leer más acerca de este planeta en el siguiente enlace:
Mercurio registra las temperaturas máximas más altas, pero al no tener atmósfera, sus temperaturas mínimas son bajísimas. Estas se dan en la zona que no da el Sol, esa zona está en sombra durante meses, pues el tiempo de rotación es muy largo, de 58 días. Su periodo de translación (lo que sería su año) dura 88 días.
Otro dato curioso es su tamaño, el planeta más pequeño del sistema solar desde que Plutón no se considera un planeta. Combinando su pequeño tamaño con la distancia a la que se encuentra a nosotros, podemos verlo con un tamaño muy pequeño. Aquí os presento un montaje que he realizado con las fotografías que he tomado a los planetas hasta ahora, todas las fotografías con el mismo aumento, comparando así el tamaño de los planetas vistos desde la Tierra:
De izquierda a derecha: Júpiter, Venus y Mercurio. Hay muchas más cosas de las que hablar de cada planeta, conforme realice las fotografías les iré contando algunas de ellas. Si quieren, pueden leer más información sobre el planeta Júpiter pueden acceder a los siguientes enlaces:
Un saludo.
Preciosa foto de Mercurio, sigue así.
ResponderEliminarEs muy interesante, me llama la atencion lo lenta que es la rotacion de Mercurio siendo tan pequeño, podrias darme una idea de porque. Gracias. Un saludo.
ResponderEliminarEsa es una muy buena pregunta.
EliminarEl tiempo de rotación de un planeta puede depender de muchos factores. En general suele producirse una resonancia entorno al tiempo de rotación y el de traslación, es decir, que los tiempos se relacionen entre ellos con números enteros. Esto se puede observar en que el tiempo de traslación es de 88 días y el de rotación es de 58 días, la relación entre ellos es que el tiempo de rotación del planeta es aproximadamente dos tercios el de traslación.
Esta relación entre los periodos y muchas otras del mismo tipo se producirían en la mayoría de los cuerpos en órbita si no fuesen perturbados por asteroides o cualquier cosa que les haga cambiar su rotación. La Tierra, por ejemplo, ha debido ser golpeada para que su periodo de rotación sea tan pequeño.
Muchas gracias por tu pregunta ya que es un buen tema a tratar en la siguiente entrada de Mercurio.
Un saludo.