Hola a todos. Esta semana continúo mostrándoles imágenes de cielo profundo. Hoy les enseño la fotografía que he realizado a la nebulosa Trífida. Esta nebulosa recibe el número 20 en el catálogo Messier y el 6514 en el NGC. Se encuentra, al igual que la nebulosa del Lago, en la constelación de Sagitario, observable en verano desde el hemisferio norte y en invierno desde el Sur.
Además de la conocida nebulosa Trífida, también capté en la misma fotografía el cúmulo abierto M 21 / NGC 6531. Se encuentra aparentemente muy cercano a la nebulosa y por ello cupieron ambos en la siguiente fotografía (cúmulo a la izquierda, nebulosa a la derecha):
Nebulosa Trífida
La nebulosa Trífida absorbe casi toda la atención de la fotografía, su atractivo reside en la diferencia de colores de las dos nebulosas que la forman, de esa manera tiene forma de ocho o quizá de dos ojos, cada uno de un color, incluso las venas de los ojos podrían ser las nebulosas oscuras. Son admirables las formas que toman las nebulosas en el cielo.
Esta nebulosa, al igual que la nebulosa del águila, tiene su origen en una supernova antigua y de ella nacen constantemente nuevas estrellas, sobre la formación de la nebulosa y la evolución estelar pueden leer en la siguiente entrada:
El tamaño de la nebulosa es mucho menor que la del águila, tan solo de 25 años luz en su mayor diámetro. Esto quiere decir que es muy joven y, por lo tanto, muy fértil creando nuevas estrellas. Se encuentra a unos 5500 años luz de nosotros.
Cúmulo abierto, nacimiento y desarrollo
A la izquierda de la nebulosa tenemos el cúmulo abierto M 21 que contiene a 57 estrellas y que se encuentra a unos 4300 años luz de nosotros, fíjense en lo cercanos que parecen los dos objetos entre ellos y las largas distancias que los separan. Este cúmulo es relativamente joven, de unos 5 millones de años de antigüedad, y con algo más de exposición se apreciaría una nebulosa de reflexión como la que tienen las Pléyades.
Este tipo de cúmulos nacen en una misma nebulosa y han partido de la misma estrella madre. Esta estrella terminó su vida en una nova o supernova produciendo una nebulosa que con el paso de los años se congregó en lo que ahora son las 57 estrellas. La edad de estos cúmulos suele ser corta, pues sus estrellas aún están unidas gravitatoriamente y se mueven juntas por la galaxia.
Pero con el paso de los años esa unión se desestabiliza, pues el cúmulo se acerca a estrellas masivas u otros cúmulos y acaba expandiéndose, es por eso que se le puede todavía apreciar su corta edad. Otro motivo de su corta edad es esa nebulosa de reflexión que he mencionado antes.
El polvo de la nebulosa primigenia de la que han nacido las estrellas aún no se ha congregado en planetas ni ha caído a las estrellas, por eso queda unido al cúmulo. Pero ya no desprende luz porque solo quedan metales pesados que no emiten luz visible, es por eso que la única forma de apreciar ese polvo es por el reflejo de las estrellas, de ahí el nombre de “nebulosa de reflexión”.
Y este es el tema que quería tratar esta semana, si quieren leer más acerca de las nebulosas de reflexión pueden acceder a la entrada de las Pléyades. Si les interesa el tema de los cúmulos pueden visitar el Cúmulo del Pesebre. Y por último, si quieren indagar en la evolución de las estrellas y la formación de las nebulosas brillantes, les recomiendo que visiten la Nebulosa del águila y los pilares de la creación.
Espero que les haya gustado, les espero la semana que viene con más fotografías asombrosas (ahora es momento de nebulosas) y muchos comentarios sobre ellas, un saludo.
Genial, de que país eres?
ResponderEliminarGracias. Soy de España.
EliminarQuerido David:
ResponderEliminarMi cámara sólo puede hacer fotos de 15 segundos máximo. ¿podría hacer las fotos con ese tiempo de exposición apilando más fotos?. Mi telescopio también es un Newton 200/1000 F5. Un cordial saludo, Antonio