La Luna sobre los pinos

Hola a todos, bienvenidos una semana más al blog El cielo de Rasal. Esta semana tengo preparado algo que desde hace varios meses llevo intentando hacer: Grabar en video la salida de la Luna a través de los árboles. Es un trabajo complejo que al fin, esta semana he podido realizar. Como muestra les enseño estas imágenes extraídas del video que plasman ese momento mágico que es la salida de la Luna:

Esta imagen es una toma única a 1/2000 segundos de exposición y 400 ISO.

Fue tomada el Sábado 1 de Agosto del 2015 a las 20:45 TU.

El equipo utilizado es un telescopio reflector Newton 200/1000 y una cámara Canon EOS 1200D.

Esta imagen es una toma única a 1/2000 segundos de exposición y 400 ISO.

Fue tomada el Sábado 1 de Agosto del 2015 a las 20:45 TU.

El equipo utilizado es un telescopio reflector Newton 200/1000 y una cámara Canon EOS 1200D.

La suma de las imágenes pueden verla en el siguiente video que reúne todo la salida de la Luna, exceptuando el principio por razones que les explicaré más adelante:

La complejidad de grabar este video reside en que a pesar de tener orientado el telescopio, no se ve aparecer la Luna hasta que comienza a salir, momento en el que hay que colocar el encuadre de la imagen y ajustar los parámetros del video. Todo eso hace perder algunos segundos del principio de la salida de la Luna que complican la grabación. A pesar de ello, puede verse más de la mitad de la salida y los bonitos árboles haciendo sombra al perfil de la Luna.

El mes de Julio

En este mes tiene especial importancia la Luna por varias razones. Cada muchos meses sucede que hay dos lunas llenas en el mismo mes, a ese acontecimiento se le llama “Luna azul” que como podrán comprobar, nada tiene que ver con su color, pero no deja de ser un acontecimiento curioso. El periodo de rotación de la Luna coincide con el de translación, es por eso que siempre le observamos la misma cara y siempre tiene una oculta.

Este fenómeno no es tan extraño si pensamos en que la Tierra y la Luna son un sistema de osciladores en resonancia. En estos casos suele suceder que el periodo de rotación esté relacionado con el de translación a través de una relación de números enteros, en este caso son idénticos. Un ejemplo típico es el de Mercurio, que tarda en dar una vuelta al Sol aproximadamente el mismo tiempo que tarda en dar una vuelta y media sobre sí mismo.

Pues bien, el tiempo de rotación de la Luna es aproximadamente de 29 días. Y puesto que los meses son algo más largos, el día de Luna llena va cambiando conforme pasan los meses aproximadamente un día al mes, y cuando ese día pasa de un mes a otro, como ha ocurrido la Luna llena del 31 de Julio, es cuando habitualmente, se producen estas lunas azules.

La era espacial

Otra de las razones por las que este mes es especial para la Luna es por el aniversario de la primera vez que el humano posó el pie sobre ella. Como ya sabrán, este mes ha hecho 46 años de ese logro y es algo a tener muy en cuenta. La tecnología desde ese entonces ha mejorado considerablemente y desde entonces se han enviado sondas no tripuladas a todos los planetas del sistema solar, a varios planetas enanos como Ceres o Plutón, al que llegó New Horizonts el pasado mes de Julio. Este año se ha aterrizado en un cometa y se han dos planetas enanos, realmente estamos viviendo una nueva era espacial.

Próximamente hay pensamientos de volver a la Luna en menos de cinco años para formar un campamento, del mismo modo, para el año 2030 se tiene pensado hacer un viaje sin retorno a Marte, incluso han hecho un proyecto para realizar un reality show allí en Marte, la idea es sobrecogedora, sobretodo entendiendo que las personas que consigan llegar, nunca podrán volver a la Tierra.

Por estas razones, Julio ha sido el mes de la Luna y todo lo que representa para el ser humano. Este astro que observan emerger de entre los árboles del valle es, junto con el Sol, el más influyente en nuestras vidas y en la propia Tierra.

Sistema en rotación

Como he mencionado anteriormente, la Tierra y la Luna forman parte de un sistema en rotación. Una de las características de este sistema es que las órbitas de los dos astros se producen entorno al centro de masas. Esto quiere decir que en realidad la Luna no da vueltas a la Tierra, sino al punto de equilibrio de las masas. Ese punto se encuentra obviamente dentro de la Tierra porque es mucho más masiva, de hecho es más de ochenta veces más masiva que la Luna, por lo que el centro de masas se encuentra a unos mil setecientos kilómetros de la superficie terrestre.

Esto no es algo muy conocido, pero la idea es sencilla. Si la Luna orbita entorno al centro de masas, la Tierra también lo hace, es por eso que la distancia entre ellas no siempre es constante y de vez en cuando ocurre que hace años que no está tan cerca o tan lejos. Este efecto se combina con el hecho de que las órbitas no son circulares, sino que son elípticas.

Las mareas

Otro efecto que observamos a diario producido por la unión de la Tierra con la Luna son las mareas. El efecto de marea se produce cuando un cuerpo de grandes dimensiones se siente atraído gravitatoriamente por otro cuerpo. Esa fuerza de atracción depende del tamaño del cuerpo atraído, de la distancia que los separa y de la fuerza gravitatoria.

Se observa fácilmente en el mar, que al aparecer la Luna el nivel va aumentando, a veces hasta varios metros. Esto ocurre porque la parte del mar cercana a la Luna se siente más atraída por la gravedad que la opuesta, eso logra deformar sensiblemente al océano. El efecto puede producirse en cualquier cuerpo cuyo tamaño sea comparable a la distancia que lo separa del cuerpo atractor, en este caso la Luna.  La gravedad une a dos cuerpos cualesquiera y es más fuerte cuanto mayor es su masa y más débil cuanto mayor es la distancia entre ellos. Es por eso que en un extremo de la Tierra la fuerza que ejerce la Luna es mayor que en el otro extremo, el que está más alejado de ella.

Piensen en el tamaño que tiene la Tierra y los efectos que producen las mareas en ella, con el pequeño tamaño que tenemos los seres humanos sería completamente imposible percibir el efecto de marea en nosotros. Si lo pudiésemos percibir, sentiríamos un tirón gravitatorio más fuerte hacia la Luna en la cabeza que en los pies, estirándonos el cuerpo. Esos efectos solo se percibirían en cuerpos muy masivos, como los agujeros negros, ocurriendo lo que comúnmente se denomina “espaguetización”. Yo sé que al principio esto puede resultar confuso, cualquier duda que tengan estoy encantado de resolverla en los comentarios.

Y podría seguir hablándoles de curiosidades como estas de la Luna y los astros, pero me reservo para otras ocasiones, espero que les haya gustado y nos vemos la semana que viene con más astrofotografías y comentarios astronómicos.

Un saludo y buenos cielos.